lunes, 22 de septiembre de 2014

de la ansiedad


Hace ya algún tiempo os dejamos con la estupenda descripición que de un ataque de pánico nos hacía el escritor Paul Auster, hoy queremos compartir la peculiar visión, pero no menos acertada, de la autora Elvira Lindo sobre el espectro de los trastornos ansiosos, aquí la tenéis:

"Ser ansioso no quiere decir tener cierta ansiedad cuando toca, porque eso es algo saludable; ser ansioso es tener un alien en el estómago y convivir con el monstruo de por vida. El ansioso no suele compartir sus crisis con nadie porque, por un lado, se siente algo avergonzado de generarse a sí mismo tal cantidad de síntomas y, por otro, ni él mismo entiende que sus diversos males sean provocados por la agitación mental. Del miedo a volar, que es uno de los más comunes, a la fobia al queso o a los botones; de los sudores repentinos a la tartamudez; del hormigueo a los mareos; del vómito al miedo a vomitar; de los dolores en las articulaciones a los de cabeza; del estreñimiento a la diarrea; del pavor a hablar en público a pensar que uno puede tirarse desde una ventana al vacío si de pronto siente el impulso. No hace falta seguir, el catálogo es interminable y el cerebro muy imaginativo: cada ser ansioso tiene su abanico de síntomas y neuras que son como una especie de derivación de los miedos existenciales.
La ansiedad excesiva no favorece la creatividad, al contrario, incapacita. Pero como me dijo una vez un amigo psiquiatra: debemos ayudar al ansioso a que se calme, pero no tanto como para borrarle todas sus preocupaciones existenciales. O sea, calmar al atormentado sin convertirlo en un idiota. Ay."

de elpais.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario